Junio 20, 2006. Balance Electoral

BALANCE ELECTORAL AL 20.06.06. Rómulo Lares Sánchez

Durante las últimas semanas hemos participado en el avance de la escenificación de la parodia que desarrollan el CNE y sus aliados, atendida ampliamente por los medios de comunicación social, correspondiente a la “auditoria” del Registro Electoral-RE propuesta por los rectores de las universidades autónomas: UCV, USB y UCAB, incorporándose adicionalmente varias universidades nacionales y el IVIC, éstos últimos dependientes de Poder Ejecutivo.

Las instituciones siguen comportándose con absoluta carencia de seriedad, atributo que debe orientar los pasos de la gestión de los asuntos públicos. En este caso, lo lamentable es que se unan al coro instituciones que “en teoría” mantienen algún nivel de autonomía, me refiero a la UCV-USB-UCAB.

Desde que los 3 rectores de estas universidades se acercaron al CNE de Rodríguez-Mejías para proponer la auditoria del RE, como una “contribución” de la Academia-Universidad para lograr la confianza de los ciudadanos y asegurar la participación masiva el 3DIC06, manifesté lo siguiente: 1) No es seria una institución que ofrezca y acepte realizar un trabajo o servicio que, como bien se sabe, no es posible realizar ni concluir. El RE es sencillamente INAUDITABLE. Este concepto lo tiene claro una empresa auditora que proteja y defienda su prestigio, jamás se prestaría para auditar lo inauditable. 2) Tampoco es seria una institución, en este caso las 3 universidades, que ofrezca sus servicios a una institución absolutamente deslegitimada e ilegal, pero sobre todo delincuente y ejemplo del “terrorismo de Estado”, como lo es el CNE. 3) La Academia-Universidad, particularmente estas universidades, conocen por intermedio de prominentes titulares académicos y grupos de investigación, la absoluta manipulación del RE, además de su “oficial” y total clandestinidad, a partir del período comprendido entre agosto 2002 hasta julio 2003, durante el que se publicó mensualmente por primera y última vez en la historia del CSE-CNE. 4) Componentes externos al RE tales como la “cedulación Express” e incorporación de los nuevos cedulados de manera automática; las migraciones de millones de inscritos, para sólo citar los más gruesos, impiden de raíz el uso del RE para cualquier acto electoral serio. 5) Mediando la complicidad, deliberada o “ingenua” de las universidades, se ha engañado a la opinión pública haciéndole creer que las elecciones del 3DIC06 serán posibles, aceptables y limpias, al resolver el problema de la credibilidad del RE. Absolutamente falso porque se deben resolver una larga lista de vicios, para poder hablar de elecciones.

El enemigo mayor que tenemos los venezolanos de hoy es, sin lugar a dudas, la infinita capacidad de manipulación de la opinión pública del régimen; la torpe, cómplice reacción de las “oposiciones” y la incapacidad de la sociedad para desenmascararla. Esta implacable incapacidad es potenciada por la imprudente reacción de diversos actores, en este caso de estas 3 universidades. Además está condenada por la reacción de los medios, para quienes el juego prioritario es la defensa del “interés del medio”, “obligados” por la presión y represión del régimen, justificada desde la política de contratación de la publicidad del Estado, hasta la persecución administrativa, fiscal y judicial de periodistas y editores.

Las autoridades de estas 3 universidades adoptaron como oferta electoral y como política para su gestión, el diálogo con el “régimen”, con el objeto de establecer mecanismos de comunicación y negociación que les permitiese “manejar” las relaciones con el régimen, minimizando los efectos negativos sobre el funcionamiento y autonomía de sus universidades. Como sabemos, hasta la UCAB, o la Iglesia Católica dependen sustancialmente para el desarrollo de sus programas, de las asignaciones del presupuesto nacional. ¿Qué diferencia existe entre esta “política” y la de los medios de comunicación social? Lo cierto es que ambas privilegian la “existencia” de cada institución, como vía para “proteger” la Nación. Este es el tema central del “engaño” en el que sobrevivimos en Venezuela.

Lo grave de la iniciativa universitaria es que se ha hecho creer al país: 1) Que las universidades son capaces de resolver los problemas del RE. 2) Que resuelto el caso RE, que no tienen capacidad para resolver, se abre la posibilidad de elecciones. 3) Que el fraude continuo electoral, referendos consultivo y revocatorios, elecciones regionales, municipales y de la Asamblea Nacional son hechos que deben ser olvidados; este último arrastra la destrucción de principios éticos fundamentales para cualquier sociedad, indispensables para cualquiera democracia: la legitimidad del voto para elegir funcionarios y para dirimir diferencias políticas. Las 3 universidades tienen una gama de problemas internos, además de los del sector universitario en general, pero desconocen prominentes estudios realizados por sus científicos y académicos que demuestran la INAUDITABILIDAD del RE.

El origen de la “ética” de negociar para vivir, “protegiendo” los intereses de los miembros de la comunidad, esperando la “oportunidad” para rescatar la patria, tiene su origen y es idéntica a la que han esgrimido los “candidatos”, a gobernador, alcalde, concejal al cuerpo legislativo del estado, concejal al concejo municipal, miembro de junta parroquial y diputado a la Asamblea Nacional. Todos con un argumento u otro han privilegiado los intereses de “sus comunidades e instituciones” antes del interés nacional: DEMOCRACIA o DICTADURA. Orden o anarquía. Paz o incertidumbre, secuestro, ajusticiamiento, encarcelamiento, muerte. Pero debemos entender que esta ética debió tragarse primero la píldora del fraude electoral continuado, humillante, degradante, representado por el Referéndum Consultivo, Referéndum Revocatorio I y Referéndum Revocatorio II, para luego acceder a todos esos cargos de representación popular ilegítimamente y en complicidad total con el régimen.

En el caso particular de la “novela universitaria” se ha dividido la opinión entre los rectores y los científicos. Produciéndose por parte de los rectores, declaraciones realmente lamentables, que justifican plenamente que connotados miembros del régimen puedan afirmar que “los rectores universitarios actúan políticamente”. Metieron a sus instituciones en esta trampa y son responsables de su caída dentro del pozo y difícil será recuperar su prestigio.

La comprensión de la institución electoral, en el caso de Venezuela, elevado a Poder Publico Nacional, al CNE como una institución política y las universidades como instituciones técnicas es equivocada y grave. Ni las universidades son técnicas o políticas, ni un Poder Público es técnico o político, ambos son ambas cosas.

Autoridades en materia electoral, tales como Carlos Delgado Chapellín han coincidido en la necesidad de “rehacer el RE”. El Dr. Delgado opina que esto se puede hacer en un mes. En intervenciones públicas he manifestado la necesidad de organizar una o dos jornadas del tipo “Censo Nacional de Población”, para involucrar y asegurar la participación de los ciudadanos en la construcción y depuración del RE, necesaria para devolverles la confianza en este instrumento -pero nunca suficiente para recuperar la confianza en el VOTO-, cumpliendo con la Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política-LOSSPP vigente, particularmente en sus artículos 67 y 68, nunca cumplidos, a pesar del interés en su aplicación de la directiva del CNE presidida por Alfredo Avella Guevara de la que también formé parte, para activar la figura indispensable de las Vecindades Electorales.

La grave crisis existencial de la República se resolverá cuando cada quien se ocupe primero de lo que está bajo su responsabilidad, dirija sus instituciones al cumplimiento de sus objetivos, sin descuidar, menos sacrificar las instituciones que han sido destruidas pretendiendo contribuir con la recuperación de la democracia sustituyéndolas.