DE LOS TRES ILUMINADOS A LA FICCIÓN DE LA UNIDAD. LA PÓLIZA DE SEGURO “COND’ER GUÁCHARO”. Rómulo Lares Sánchez. 15.08.06
Del comportamiento de Hugo Chávez a partir del Referéndum Consultivo-RC, Referéndum Revocatorio 1-RR1 y RR2, se puede hoy concluir que había decidido desde el proceso constituyente, con la incorporación de la figura de la reelección del Presidente de la República al texto constitucional, que él sería el candidato a la reelección de “las fuerzas del cambio”. A partir del 15AGO04 se transformó en usurpador de la Jefatura del Estado. Al aprobar la escenografía del “año electoral 2006” donde figura como el candidato único del régimen, también decidió quiénes eran los “aceptables” para incorporarse a la lista de precandidatos de la denominada “candidatura de la unidad” de “las oposiciones”, que le asegure que no se quedaría sólo, como ocurrió el 4DIC05, en el plebiscito disfrazado de elección de la Asamblea Nacional-AN; también influyó en la forma como el tal “candidato de la unidad” seria seleccionado. También promovió la “póliza de seguro”, con candidatos independientes, que “llegarían hasta el final”, entre ellos el cómico-folklórico cuyo nombre artístico es el Cond’er Guácharo.
SÚMATE, la organización civil que dispuso y convocó a los ciudadanos a “primarias” para decidir con su voto, extrayendo la selección del candidato de “las oposiciones” desde los cogollos para asignarla a las bases, ha sido atacada por todos los flancos, tanto desde el régimen persiguiendo implacablemente a sus dirigentes, hasta declararlos finalmente “traidores a la patria”, como desde las oposiciones lideradas por los “3 iluminados”, saboteando de diversas maneras la participación y ejecución de la consulta electoral. Los pre-candidatos del método de “las encuestas”, método finalmente impuesto, fueron presentados como los candidatos de la unidad y el resto de los pre-candidatos a las primarias, quienes declinaron su postulación en favor de la “unidad” fueron todos incorporados al “equipo de campaña”.
Ahora bien, ¿cómo pretenden ellos, ahora convertidos en candidatos a Presidente, Vicepresidente, Asesor fundamental y los incorporados al equipo “de campaña”, transmitir confianza a la ciudadanía, en su mayoría demócrata, si ninguno está convencido del fraude electoral consolidado el 15AGO04?, cuando Hugo Chávez perdió su condición “constitucional” de Presidente de la República, acto transformado por el CNE en un “Referéndum Ratificatorio”.
Las condiciones electorales, establecidas en la Ley Orgánica del Sufragio y Participación Política-LOSPP vigente, y en los múltiples reglamentos de la norma electoral venezolana, han sido transformadas en mercancías negociables. Adicionalmente a la perversión cultural y ética de semejante negociado, desde SUMATE hasta las “oposiciones”, han pretendido defender las condiciones electorales “hasta el día del acto electoral”, a pesar de que había sido determinado mediante las múltiples desviaciones a las actividades contempladas en los cronogramas electorales, que tales normas habían sido violadas irreversiblemente y que los actos electorales fueron trasformados en “farsas electorales”; así ocurrió parcialmente en los referidos RC, RR1 y totalmente en el RR2 del 15AGO04, elecciones de Gobernadores y Alcaldes, Municipales y de la AN. Así estamos ya condenados en la “elección presidencial” del 3DIC06.
La negativa de las “oposiciones” a señalar a Hugo Chávez como usurpador de la Presidencia de la República, determina desde el origen de la escenografía del “año electoral”, la figura de “un acto democrático más”, hipótesis de inicio absolutamente falsa. Sin embargo, “las oposiciones” con su candidato de “la unidad” pretenderán hacerle creer al país que mediante otro acto electoral, efectivamente es posible elegir presidente o dirimir las diferencias políticas que dividen la nación. Es decir, la verdad que no debe ni puede ser escondida, que el país conoce y manifestó el 4DIC05: En Venezuela el CNE, a partir de AGO03, diseñó y desarrolló un Sistema Electoral-SE-VOTO para el fraude continuado que, no ha respetado, respeta, ni respetará la voluntad de los ciudadanos que participen en cualesquiera de las etapas de tales farsas electorales.
El candidato de la unidad no habla de las condiciones electorales, la comparsa mediática explica sin cesar que “el problema no es electoral”, que “derribará todos los obstáculos”, “que cobrará el 3DIC06”. La realidad, no una hipótesis política es que hoy, con el Registro Electoral-RE viciado, sus consecuencias en el desarrollo de un acto electoral, fundamentalmente sus manipulaciones, la designación de funcionarios electorales, la automatización y la participación de la Fuerza Armada-FAN y del propio CNE, no es ni será posible que se realice como si fuese una elección libre.
El propósito del “candidato de la unidad” de gobernar “para todos” durante 6 años, “porque ya sabemos que las constituyentes no sirven para resolver los problemas cotidianos de cada ciudadano” demuestra entre otras cosas, la larga distancia que entre sus propósitos iniciales manifiesta con relación a las prioridades de las mayorías nacionales, consolidadas el 4DIC05, que han adoptado no una simple posición “abstencionista”, sino la legítima opción de rechazo al CNE-SE; lo que no debe sorprender porque es coherente con el desempeño político del “candidato” y su grupo de aliados desde 1998, al considerar la histórica y difícil circunstancia como si fuera otro acto de la “alternabilidad democrática”, otra posibilidad más de cambio de régimen, sin detenerse a interpretar, nunca lo hicieron, el significado de esa manifestación popular y mayoritaria del 4DIC05. No han mostrado un ápice de interés para comprender el fenómeno que ha determinado que grupos políticos regionales y nacionales, tan importantes como cualesquiera de los que participan de la coalición del “candidato de la unidad”, tales como Acción Democrática-AD, Proyecto Venezuela-PV, Alianza Bravo Pueblo-ABP, Alianza Popular-AP y Verdad Venezuela, entre otros, declinen su participación no respaldando ni presentando candidato alguno, explicando la decisión bajo la lógica de la prioridad de la garantía de las condiciones electorales. Sencillamente, un político u organización serios, no puede invitar a una campaña electoral, tanto a sus militantes como a sus simpatizantes, al país en general, sin que la manifestación de la voluntad de cada ciudadano puede ser garantizada con el VOTO-CNE; mucho menos se puede garantizar, que desconocida como ha sido y serán los “verdaderos” resultados de cualquier consulta que realice el CNE, sería posible revertir tales resultados, es decir: “El cobro” del “candidato de la unidad”.
Un demócrata no puede actuar como si hubiese democracia, que no la hay, proponer “su solución”, dándole la espalda a la verdadera confrontación democrática, que no la hay, que impide y sataniza la participación tanto de precandidatos que no sean los “autorizados” por el régimen, como de ciudadanos que promueven la no participación como instrumento democrático-participativo y pacífico, para lograr una institución electoral seria, transparente y abierta que garantice condiciones electorales racionales; ambos sectores, mayoritarios insisto, se han visto obligados a permanecer fuera de la farsa, como única opción pacífica para no contribuir a legitimar y consolidar el régimen oprobioso y desnaturalizado que controla las instituciones y la vida nacional, con el oportuno apoyo de múltiples “opositores” y “colaboradores”.
Políticos peso completo tales como Rafael Poleo, Oswaldo Álvarez Paz y Henry Ramos Allup han ofrecido su respaldo al “candidato de la unidad”, siempre que éste primero ataque desde ahora como prioridad las condiciones, oferta que creo ha sido precipitada porque el RE no es posible someterlo a la norma electoral y publicarlo, es decir, desde hace meses sabemos que no habría “condiciones electorales”, ni siquiera en el escenario “forzado” impuesto por el régimen y “las oposiciones”, que estrictamente pasó por alto múltiples condiciones necesarias para garantizar una elección.
No creo que la construcción de la nueva Venezuela se pueda fundar en estas frágiles y pantanosas bases, que desconocen la inexistencia absoluta de democracia, la persecución, discriminación de los opositores, la violación de los Derechos Humanos-DDHH y de prácticamente todas las leyes de la República, la perversión de todas sus instituciones. Promover elecciones presidenciales el 3DIC06 en tales condiciones, equivale a traicionar no sólo principios democráticos y éticos, sino desconocer la última voluntad de la nación manifestada el 4DIC05, de desprecio tanto por el VOTO-CNE y el Sistema Electoral-SE vigente, como por las diversas instituciones nacionales, en esa oportunidad particularmente la AN y el CNE.
No es atacando la gestión administrativa del régimen dictatorial ni la eficiencia de los servicios públicos, sino la desaparición de la libertad, la democracia, la institucionalidad, como podremos conducirnos hacia una salida. Ha sido determinado académicamente por la Cátedra “Pío Tamayo” de la Universidad Central de Venezuela-UCV, mediante la investigación de la “Historia Actual”, que el “caos administrativo” no es sencillamente una cuestión de cuadros incompetentes, sino más bien una estrategia para disimular el verdadero objetivo político: la destrucción de las instituciones democráticas, desde sus raíces.
El dogma según el que la única salida es la “participación” en la “pantomima” del 3DIC06, ha sido impuesto por aquéllos que pretenden extender el estilo de este régimen bajo su “nueva” autoridad; los mismos que promueven la ineficacia del rechazo al CNE-VOTO manifestado el 4DIC05, señalando que “no se logró nada”, actitud desbordante de cinismo que tampoco puede sorprender, cuando de espaldas a las mayorías que se manifestaron rechazando el Sistema Electoral-SE-CNE, y que como consecuencia del rechazo deslegitimaron la propia Asamblea nacional-AN, salieron a respaldar tanto el SE-CNE como a la AN; la explicación aunque nunca la dieron es lógica, necesitan del régimen, de su AN y demás “instituciones” para “administrar” sus estados, sus municipios y sus instituciones parroquiales, pero más grave aún, pertenecen al mismo clan de complicidades que necesitan reconocer al SE-CNE que los “legitimó” en los fraudes ya mencionados, en las elecciones de gobernadores, alcaldes y autoridades legislativas de los estados y municipios.
Esta no es la Venezuela que las mayorías queremos. Es de esperar que cada día crezca el número de los ciudadanos, de los demócratas dispuestos a defenderla a cualquier precio.
jueves, 26 de marzo de 2009
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